jueves, 10 de mayo de 2012

Biografía



Nicolás junto con sus padres y hermanos
Nicolás II de Rusia (actualmente San Nicolás II de Rusia tras su canonización) (Nikolai Aleksandrovich Romanov, en ruso Николáй Алексáндрович Ромáнов) (San Petersburgo, Rusia, 18 de mayo de 1868 – Ekaterimburgo, Rusia, 17 de julio de 1918) fue el último zar de Rusia. Heredó de sus antepasados una memoria privilegiada, una disciplina rigurosa, una fe profunda y la capacidad para encantar a la gente. Nunca elevó la voz a su interlocutor, siempre respetuoso en la comunicación, pulcro y puntual. “El rasgo especial de Nicolás II es que es una persona de muy buen genio y extraordinariamente bien educado. Seguro nunca he encontrado ninguna persona más educada que nuestro emperador reinante”, escribía el ministro de Finanzas, Serguéi Vitte. “El emperador fue agradable, tratable, equilibrado. Fue una persona muy buena. Tantos años viví junto a él y ni una sola vez lo vi enojado. Era muy sencillo y humilde”, recordaba el ayudante de cámara de la esposa del emperador, Alexéi Vólkov.
Hijo del zar Alejandro III, gobernó desde la muerte del padre, el 1 de noviembre de 1894, hasta su abdicación el 15 de marzo de 1917, cuando renunció en su nombre y en nombre de su heredero al trono y este pasó a su hermano, el gran duque Miguel. 
Durante su reinado vio como el Imperio ruso sufrió una debacle económica y militar. Fue apodado Nicolás, el Sanguinario por los críticos debido a la Tragedia de Khodynka, el Domingo Sangriento y por los pogromos antisemitas que se produjeron durante su reinado. Como jefe de Estado, aprobó la movilización de agosto de 1914 que marcó el inicio de la Primera Guerra Mundial, la revolución y la consecuente caída de la dinastía Romanov.